Piso amueblado con terraza y vistas al mar en alquiler en Colonia de Sant Jordi, a 250 m de la playa

Vivir a pasos del Mediterráneo, con luz todo el día, terraza con vistas al mar y la comodidad de tener plaza de aparcamiento en el mismo edificio. Eso es exactamente lo que ofrece este amplio piso amueblado en alquiler en la Colonia de Sant Jordi, una de las zonas costeras más apreciadas del sur de Mallorca por su ambiente relajado, sus playas de agua turquesa y su oferta de servicios abierta todo el año. La vivienda está situada a tan solo 250 metros de la playa, de modo que llegar caminando a la arena o al paseo marítimo forma parte de la rutina diaria, igual que bajar a comprar el pan, tomar un café o cenar frente al puerto.

Desde el primer momento, la sensación es de amplitud y luminosidad. El salón comedor, protagonista del espacio de día, se abre directamente a la terraza exterior mediante grandes carpinterías que favorecen la entrada de luz natural y la ventilación cruzada. La terraza, con vistas al mar, es el lugar perfecto para desayunar al aire libre, leer con la brisa marina de fondo o cerrar el día contemplando el horizonte. Gracias a su orientación, el piso recibe muchísima luz durante buena parte de la jornada, lo que se traduce en bienestar térmico y una agradable calidez en cualquier época del año.

La zona de cocina, independiente y totalmente equipada, permite cocinar con comodidad sin interferir en la tranquilidad del salón. La distribución separa con acierto las áreas sociales de las de descanso, algo especialmente útil tanto para la vida cotidiana como para recibir visitas. En el ala más privada se encuentran tres habitaciones exteriores, todas con armarios empotrados que facilitan el almacenamiento y el orden. Los dormitorios disfrutan de luz natural y ventilación directa, ideales para mantener estancias frescas y saludables. Para mayor funcionalidad, la vivienda dispone de dos cuartos de baño con bañera, una solución muy práctica para familias, estancias largas o quienes valoran disponer de un baño de cortesía y otro de uso más privado.

El piso se entrega amueblado, con un equipamiento pensado para entrar a vivir desde el primer día sin inversiones adicionales. Su estado y su configuración lo convierten en una opción excelente tanto para residencia habitual como para estancias por temporadas más largas, siempre con la ventaja de la plaza de aparcamiento en el mismo edificio, un valor añadido incuestionable en una zona de costa donde la comodidad del día a día cuenta. Subir con compras, maletas o equipamiento de playa resulta sencillo y directo, del garaje a casa.

La ubicación dentro de la Colonia de Sant Jordi es otro de sus grandes atractivos. En un radio muy corto se concentran supermercados, panaderías, farmacia, restaurantes y el agradable paseo marítimo. Además de la playa más cercana —a solo 250 metros—, el entorno ofrece un abanico de calas y arenales de referencia en Mallorca: Es Dolç, Es Port o, a pocos minutos en coche, Es Trenc y Ses Covetes. La Colonia de Sant Jordi combina el espíritu marinero con servicios durante todo el año, rutas litorales para pasear o hacer deporte y un puerto que aporta vida y variedad gastronómica. Todo ello sin renunciar a la tranquilidad que buscan quienes deciden establecerse junto al mar.

Si lo que necesitas es un piso de alquiler con vistas al mar en la Colonia de Sant Jordi, terraza para disfrutar del exterior, tres dormitorios exteriores con armarios, cocina independiente equipada, dos baños con bañera y plaza de aparcamiento en finca, esta vivienda reúne los requisitos clave: luz natural, funcionalidad, ubicación estratégica y un interior preparado para empezar a disfrutar desde el primer día. La proximidad a la playa y a los servicios, unida a la terraza con vistas, marca la diferencia para vivir el Mediterráneo con comodidad real: salir a correr por el paseo al amanecer, bajar a la playa sin planear, volver a casa y abrir el ventanal del salón para que entre la brisa.

En definitiva, un piso de alquiler en la Colonia de Sant Jordi que aúna vistas al mar, amplitud y practicidad, ideal para quienes valoran el equilibrio entre vida urbana junto al puerto y calma de un barrio costero. Contacta para concertar una visita y comprobar de primera mano cómo esta vivienda encaja con la vida que quieres junto al mar